Día 3 - Vuelta a Smara

…llegamos de nuevo a Smara y nos fuimos a conocer el mercado y ha comprar los recuerdos, más para los que se quedaron aquí que para nosotras, ya que nos llevamos los mejores recuerdos en la cabeza, en la cámara, en los regalos que ellos nos habían hecho ya y que aun nos harían.

El mercado consiste en dos calles “largas”. Se encuentran en calles de arena, cuando te asomas ves un montón de tiendas con puertas grandes, delante de ellas hay tenderos, mesas donde exponen los objetos, normalmente es donde tienen las pulseras, anillos y collares, una vez que entras dentro puedes ver frascos para colonia, alfombras, melfas, pañuelos,… estando allí y dentro de una de ellas me paso una anécdota lo mínimo curiosa, estando dentro mirando pulseras para una amiga un hombre MUY mayor se acerca a Daryalha y me empieza a decirle algo a lo que veo que ella le responde algo que debe significar que no que no, entonces el hombre se acerca a mi coge una pulsera y me coge el brazo y me dice algo en hasani (el dialecto que hablan) entonces (ingenua de mi) le digo no, no, no, no, me alejo y me salgo de la tienda, pero veo que Asisa sale detrás mía riéndose bastante animada, entonces le pregunto que qué le ha hecho tanta gracia y me dice que el hombre lo que estaba haciendo era ¡¡¡¡pedir mi mano!!!!! Madre mía imaginaos que me gusta la pulsera y le digo que sí… Tengo que decir que en varias ocasiones pidieron mi mano y la de mi hermana pero por lo menos fueron hombres o chicos más jóvenes… La segunda calle es donde venden cosas para cocinar, comida, carne de camello y donde se encuentra una especie de herbolario que me encanto, por el olor y la cantidad de cosas varias que tenía, entre ellas unas piedrecillas de las que ya os hablare… Después estuvimos en la panadería y volvimos a casa de Daryalha. Cuando baje del coche una niña se asomo a una puerta toda mojada…era Dreya, nos había oído llegar y quería contarme que la habían bañado, todo esto en hasani pero bueno los gestos, y ellos son muy expresivos, hicieron que en esos días nos entendiéramos muy bien…Después se vino con nosotros a casa. Estuvimos cenando, nos quedamos un rato hablando y haciendo el tonto pero en seguida nos fuimos a dormir porque al día siguiente teníamos que levantarnos a las 4.30 de la mañana para ir a Tifariti …